Bellas Artes Republica dominicana

El Palacio de Bellas Artes fue inaugurado el 15 de mayo de 1956. Este impresionante edificio, rodeado de jardines, está considerado como la máxima expresión de los recursos arquitectónicos de su época. Ocupa un área de 13,000 m2 y cuenta con un auditorio cuya capacidad es de 614 personas, que ha servido como centro de presentación al Teatro de Bellas Artes, que es la compañía oficial de teatro profesional dominicano, compuesto por actores y actrices profesionales.
De estilo neoclásico con imponentes columnas, tiene cuatro frentes, uno para cada una de las calles que lo enmarcan (al Norte, la calle Arístides Fiallo Cabral; al sur la Ave. Independencia -entrada al auditorio-; el este, la calle Mahatma Ghandi y al oeste la Ave. Máximo Gómez).
Dentro del Palacio de Bellas Artes y además de su Dirección y dependencias administrativas, se han desempeñado el Conservatorio Nacional de Música y Declamación, las oficinas de la Dirección General de Bellas Artes, un Salón de Exhibiciones, un Salón de Audición, una Biblioteca y una Cafetería. Todos estos departamentos se encontraban alrededor de un espejo de agua con galerías para la circulación, en cuyo centro puede apreciarse, en mármol blanco de Carrara, el hermoso grupo escultórico Dafne y Apolo de Bernini.
Otras instituciones de la Dirección General de Bellas Artes que han funcionado en este lugar son: la Dirección de la Orquesta Sinfónica Nacional y del Coro Nacional así como los Cantantes Líricos; la Dirección General de Cultura y Escuela de Arte Dramático, el Teatro Rodante, el Ballet Clásico Nacional, que es la compañía oficial de ballet dominicano, la Escuela Nacional de Danza, el Ballet Folklórico y la Escuela de Artes Plásticas.
Debido a la gran demanda y crecimiento tuvieron que ser instalados fuera del recinto el Conservatorio Nacional de Música, la Escuela Elemental de Música y la Escuela Nacional de Bellas Artes, así como el Archivo Nacional de Música, creado este último el 15 de noviembre de 1968 por disposición oficial mediante reglamento 30-11, con la finalidad de conservar, investigar y difundir la música dominicana. Como su primera directora fue nombrada la reconocida pianista Elila Mena, cuya memoria fue honrada posteriormente al dársele su nombre a la Escuela Elemental de Música.